Que triste cuando sientes qué haces muchos sacrificios
por alguien y no te sientes correspondido, sientes que no
le importas a la otra persona por la que das todo, que ni
siquiera pides mucho. Solo un pequeño detalle, solo una
ida a desayunar o comer pero que salga de su mente, que
sea por su iniciativa.
Un gesto de amor muy chiquito pero que valga algo para
el corazón porque al final los pequeños detalles son los
que hacen la gran diferencia.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario